
Autoridades de Gobierno potencian panadería de la cárcel de Linares
Negocio funciona desde 2005, pero en noviembre del 2014 dio un salto de calidad al renovar la maquinaria para aumentar su producción, con la que da trabajo a doce internos del recinto
Para muchos emprender va de la mano de la libertad. Libertad para elegir qué producir, libertad para determinar cuánto cobrar, libertad para decidir dónde y cómo vender. Por eso, no deja de llamar la atención que una empresa cuyos trabajadores no gozan de libertad, tenga resultados más que satisfactorios y se erija como una opción competitiva para quienes en la Villa San Ambrosio buscan pan, queques y tortas, entre otros productos.
Ese es el caso de la panadería del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de Linares, que en 2015 se adjudicó un proyecto con el Servicio de Cooperación Técnica (Sercotec) en el concurso Crece Manufactura. Fueron tres millones y medio de pesos que permitieron renovar la maquinaria industrial, adquirir refrigeradores de alta gama, batidoras pasteleras, una plancha de prolipopileno y una batidora industrial.
Una inversión que permitió aumentar la producción para satisfacer una demanda creciente y que permite dar trabajo a doce internos, que con dedicación y esfuerzo día a día proveen de pan no sólo a la unidad, sino que también para el público que se acerca a comprar en la sala de ventas, donde también es posible encontrar queques, pasteles y otros productos de los que ya se comienza a hablar en Linares puesto que han incursionado en servicios de coctelería para eventos.
Para el director regional de Gendarmería, coronel Jorge Reyes Rioseco, la posibilidad de contar con una mejor panadería abre grandes oportunidades de reinserción social a los internos que trabajan en esta particular empresa.
“Agradezco que Sercotec haya decidido apoyar la panadería del CCP de Linares, porque así no sólo damos una posibilidad de trabajo para nuestros internos , sino que también les estamos dando la oportunidad de adquirir un oficio que les dé un soporte para cuando salgan y llegue el momento de reinsertarse”, precisó el oficial.
El director regional de Sercotec, Samuel Chambe Toledo, destacó el hecho que una política social, como lo es la reinserción de los reclusos, confluya de manera virtuosa con un programa de fomento productivo como es Crece.
“Nos interesa que la labor social que hace Gendarmería, que es súper valorable, pueda potenciarse con nuestra objetivo de acompañar a las empresas para que les vaya bien y generen impacto económico elevando sus ventas y generando más y mejores empleos. Esta es una alianza que está en su fase inicial, pero que puede tener proyecciones insospechadas”, dijo el personero.
Agregó que el mejoramiento de la panadería del CCP ha sido exitoso, ya que permitió doblar la capacidad de producción y no perder pedidos que antes de la concreción del proyecto era imposible satisfacer.
La Secretaria Regional Ministerial (Seremi) de Economía, María Elena Villagrán, dijo esperar que “esta alianza se mantenga en el tiempo. La panadería participó como una empresa más en este concurso y cumplió con todos los requerimientos. No tuvo privilegios, sino que se impuso con un buen proyecto, que nació de conversaciones entre las seremías de Justicia y Economía sobre como apoyar estos emprendimiento sociales”
En tanto, la gobernadora provincial de Linares, Claudia Aravena Lagos, manifestó que “este es un compromiso que tenemos como gobierno en el ámbito de la seguridad pública en el que no solamente nos ocupamos de la prevención del delito, sino que también entregamos herramientas para la reinserción”.
La experiencia de los internos
Juan Velásquez Correa
“No sabía nada de este oficio. Primero me postularon a un curso de capacitación y fui seleccionado para trabajar en la pastelería y también en la panadería. No lo esperaba, porque no creía ser capaz, pero me di cuenta que si podía”.
José Miguel Díaz
“Ha sido algo muy satisfactorio, novedoso y muy importante para mi futuro. Todo lo que sé, lo aprendí aquí gracias a mis compañeros y después nos vinieron a hacer un curso. Quiero decirle a la gente que los prejuicios hay que romperlos, porque es cierto que estamos en un recinto penal, pero nuestra panadería está muy bien acondicionada para trabajar, por lo que nuestros productos cumplen con todas las normas. Los productos los hacemos con cariño y con mucho esfuerzo, así que los invitamos a comprar con confianza».