En el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Linares, la Unidad de Gendarmería llevó adelante un nuevo simulacro de incendio.

La simulación incluyó un supuesto incendio al interior del penal, lo que se tradujo en la evacuación de 90 internos hacia una zona segura; todo, mientras la Brigada Especial Contra Incendios (BECI), de Gendarmería, trabajaba para controlar el fuego (situación recreada), que estaría afectando algunas dependencias de la cárcel.

En la situación participaron el cuerpo de Bomberos que desplegó tres unidades; carabineros que trabajó en el  control de tránsito, la Policía de Investigaciones que aseguró las proximidades a la unidad penal para el trabajo de los equipos de emergencia, oficina de emergencia del municipio y el SAMU que luego de ingresar a las dependencias, efectuó el traslado de un “lesionado” (caso ficticio), para  medir el tiempo de respuesta desde y hacia el Hospital de Linares.

Todo el trabajo fue seguido de cerca por un equipo de la Oficina Nacional de Emergencia, con asiento en Talca y el Ministerio del interior, representado por la Gobernación de Linares.

Luego de este nuevo so simulacro, una reunión de evaluación  permitió saber de las falencias y avances conseguidos en el último tiempo, materias que fueron analizadas por los asistentes luego de lo cual se establecieron coordinaciones a objeto de actuar de forma cada vez más eficiente en una emergencia.